Una buena parrilla para
las noches
Enrique Bellver
Manuel
Villafaina, en su local./ SUR
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Es uno de los mejores
chiringuitos situados en esta popular y concurridísima playa de
Torremolinos, no sólo por la calidad de su cocina sino también
por su amplitud y comodidad, pues dispone de dos plantas, aunque
el segundo únicamente se abre por las noches y cuando está
encendida la barbacoa.
No es frecuente encontrarse a pie
de playa con un local donde las carnes a la brasa de carbón sea
un referente y atractivo nocturno como alternativa al pescado,
que suele ser el fuerte de todos los establecimientos de este
tipo.
Para abrir boca en este tiempo,
lo mejor es decidirse por unos clásicos espetos de sardinas,
muy bien hechos y servidos en su justo punto, es decir, jugosos
y con la piel un poco churruscadita. Junto a las sardinas
también es posible tomar unas doraditas al espeto, un bocado
que, sin duda, merece la pena probar. El personal que atiende
este chiringuito es bastante afable y muy ágil cuando está
abarrotado de público. Tiene una carta de vinos bastante
interesante. |